Después de 20 años de matrimonio, Clara se ve obligada a replantear su existencia cuando su marido Pablo se va de casa para iniciar una nueva vida con Lucía, una mujer atractiva e independiente, bastante más joven que él. Clara, después de afrontar su problema con sus hijos y su familia, decide volver a su antigua carrera de abogado. En el bufete se encuentra un pleito contra la empresa inmobiliaria de su ex-marido. La demanda la ha presentado Andrés, un joven biólogo, que ha hecho de la ecología la causa de su vida, y que considera que la urbanización que pretenden construir constituye un delito ecológico. La amistad que surge entre ambos se transforma, gracias a la especial personalidad del joven, en una apasionada historia de amor que rompe sus esquemas.

Lucía, una bailarina de discoteca dada a la fuga, se refugia en un siniestro edificio de la periferia de Madrid donde su hermana Rocío vive con su hija Alba.

La Blanca Paloma es un antiguo tablao flamenco, ahora taberna y antro, situado en la margen izquierda de la ría que divide la ciudad de Bilbao. Domingo, su propietario, mantiene relaciones incestuosas con su hija Rocío. Ambos se mantienen al margen de una sociedad que les acosa por no ser de la tierra. Hasta que aparece en sus vidas Mario, un joven radical de origen andaluz que se enamora de Rocío.

Una historia de amor y desamor. De esperanza y desesperanza. De pasión y abandono. Tras dos años de convivencia, Juan ha abandonado a Marita, una mujer madura que le ha mantenido hasta que ha encontrado a Adela, otra mujer a la que puede sacarle dinero.

El conde Nado (Xavier Gurruchaga), un aristocráta dueño la multinacional de flanes "Don Flan"", está enamorado de Fénix (Marta Sánchez), cantante intergaláctica. Al no poderla conseguir con los métodos tradicionales, el malvado Nado secuestra a la científica Avelina (Chus Lampreave) para que fabrique una replica de la cantante, creando a Supernova (Marta Sánchez).

Valencia, mayo de 1959. Pilar Prades Expósito fue la última mujer ejecutada en España por garrote vil. Fue condenada a la pena capital por el asesinato de la dueña de la casa donde trabajaba como empleada doméstica. También se le imputaron dos homicidios frustrados. Los tres crímenes tenían el veneno como elemento común.

Tras una noche de copas y diversión, Ernesto muere en un accidente de coche. Sin embargo, el Dr. Berger investiga las lesiones que le han producido la muerte y observa que su cerebro está intacto. Rápidamente llama a su esposa y ayudante para llevar a cabo un experimento que consiste en trasplantar este órgano a otro cuerpo. La operación es un éxito y Ernesto se va recuperando poco a poco, pero pronto descubre horrorizado que su cuerpo es el de una mujer.