Un asesino va atemorizando a un campus universitario a golpes de cuchillos.

Marnie Watson, una chica joven que obtiene la libertad condicional tras estar en prisión por haber matado a su marido, un violento policía de Nueva York, en defensa propia. Como condición deberá llevar una pulsera en el tobillo y permanecer en el interior de su casa, sin poder alejarse más de 100 pies. El compañero de su marido muerto la observa desde el otro lado de la calle dentro de un coche, esperando que viole la libertad condicional y enviarla de nuevo a la cárcel. Pero, el radio de 100 pies no es su mayor problema, sino el espíritu de su marido con sed de venganza.

Siendo un niño, Edward Carnby (Christian Slater) tuvo una experiencia que le marcó para siempre, una prueba irrefutable de la existencia de otro mundo, siniestro y aterrador. Por ese motivo, Edward acabó convirtiéndose en investigador de lo paranormal, un detective privado especializado en casos relacionados con fenómenos supernaturales inexplicables. Ahora, el misterioso pasado de Edward está a punto de convertirse en el caso más peligroso al que se ha enfrentado jamás. 19 personas que crecieron en el mismo orfanato que él han desaparecido.

John Falcon a passé 10 ans en prison. Maintenant, il a 24 heures pour se venger de chaque personne qui a contribué à l'envoyer là-bas.

Los padres de Chris fueron asesinados cuando este era un niño, el mismo día en que el paso del cometa Halley fue visible desde la Tierra. Once años después, un nuevo cometa ilumina el cielo de París, y la población se prepara para celebrar este excepcional evento. Pero, a medida que avanza la noche, la gente empieza a comportarse de forma extraña, hasta terminar convirtiéndose en horribles criaturas. Con la ayuda de su vecino John, Chris intentará sobrevivir a una auténtica noche de miedo. Hipervitaminado homenaje a los pilares del género en los ochenta, de Carpenter a Spielberg, Dead Shadows es una midnight movie comme il faut, con suspense, escalofríos y acción a raudales.