En una pequeña ciudad, bajo un calor sofocante en el verano del 1919, un héroe de guerra permanece detenido en el fondo de un cuartel vacío. Delante de la puerta, su magullado perro ladra día y noche. No lejos de allí, en el campo, una joven, agotada por el trabajo de labor, aunque demasiado cultivada para ser una simple campesina, espera y espera. El juez que tiene que resolver este asunto es un aristócrata cuyos principios han sido alterados por la guerra. Tres personajes y en medio, un perro que guarda la llave de este drama.

Judith lleva una doble vida entre Suiza y Francia. Por un lado, Abdel, con quien está criando a su hija en común. Por el otro, Melvil, con quien tiene dos hijos un poco mayores. Poco a poco, este frágil equilibrio hecho de mentiras, secretos e idas y venidas se va fracturando. Ante el desenmascaramiento, Judith elige la huída hacia adelante.

"El origen de esta historia fue cuando mi hija, que tenía 16 o 17 años, decidió dejar el hogar para conocer el mundo, sin ningún plan trazado. Quizás porque me estaba empezando a hacer viejo, la sola idea me aterraba: mi hija a merced de este mundo salvaje y violento. En una conversación abierta con Erika, tuve que relegar mis temores personales, ella tenía el derecho a tomar sus propios riesgos. En ese momento me di cuenta que había puesto parte de mi espíritu en mi hija" -- Robert Kramer

Le docteur Paul Calmet est mort. Son fils Jean ressent à nouveau la sensation familière d'angoisse suscitée par son père; victime de cette torture morale, il est porteur du virus du malheur.

Quelques minutes avant de tuer son père et sa mère de sang froid, Benjamin Feller, un jeune homme de 18 ans sans antécédents, envoie son journal intime par la poste à son professeur de français ; il y explique et confesse son acte. L'enseignante se retrouve interrogée par les autorités et se trouve bientôt confrontée à ses propres doutes. Son goût pour la littérature l'aurait peut-être empêchée de voir la détresse de son élève dans la prose qu'il lui avait montrée bien avant son crime.

À la fin des années 1950, Paul Duméry, un assureur ruiné assassine Sarrebry, un prêteur-usurier. Le film raconte la cavale du criminel.