Jesse Stone (Tom Selleck) es un antiguo detective de homicidios de Los Ángeles que dejó la ciudad y a su exmujer para convertirse en jefe de policía de una tranquila ciudad costera de Nueva Inglaterra, Paraíso, en Massachusetts. A Stone le cuesta abandonar sus antiguas costumbres, y sigue abusando de sus dos pasiones, el whisky y las mujeres. Pero cuando se producen una serie de asesinatos, y una alumna del instituto afirma ser víctima de una violación, Stone se verá obligado a enfrentarse a sus propios demonios para resolver los crímenes.

Un cuento gótico moderno sobre crimen y redención. Cuando una joven no identificada es encontrado muerta en el lago -víctima de un crimen brutal y violento- Walter, un oficial de policía ya mayor de la pequeña ciudad, es llamado para investigar un asesinato por primera vez en décadas. Atormentado por su pasado, por la desconfianza de la comunidad y por un policía estatal que supervisa la investigación, Walter se dispone a resolver el asesinato, que se complica cuando la sospecha recae sobre el novio actual de su ex-amante. Y su vida recién reformada empieza a correr peligro cuando él mismo se convierte en sospechoso del asesinato.

Elle Spencer ha ideado un plan aterrador. Pronto su amiga, Anna Bellcroft será liberada de la cárcel, donde cumplió condena por manejar en estado de ebriedad. Anna no tiene nada. Sin familia, sin dinero, sin trabajo ... Pero Elle está ahí para ella. Lo que Elle no revela es que culpa a su padrastro por el suicidio de su madre, y Anna se convertirá en el instrumento desprevenido de su venganza.